
5 nov 2007
DeSpErTaR

4 oct 2007
Divulgación
Introducción
Se ha sugerido que la resistencia a los parásitos juega un papel importante en la evolución de los caracteres sexuales que eligen los individuos del sexo opuesto (Hamilton y Zuk 1982). Los machos con ornamentos sexuales secundarios de alta calidad tienden a tener pocos parásitos, lo que sugiere que su sistema inmune los hace más competentes que los machos con ornamentos de baja calidad (Møller y col. 1999). Las preferencias de las hembras se basan en dos procesos evolutivamente adaptativos: 1) los beneficios directos, donde las hembras eligen a machos libres de parásitos, y 2) los beneficios indirectos, donde las hembras eligen a machos con alta calidad genética basada en la resistencia a parásitos (Andersson, 1994). Sin embargo, se ha sugerido que el producir o mantener caracteres sexuales tan elaborados es costoso (en términos de supervivencia), por lo que indican la calidad genética del individuo que los posee (Zahavi 1975).
Folstad y Karter (1992) propusieron la hipótesis del handicap de la immunocompetencia para explicar cómo los caracteres sexuales masculinos pueden indicar la resistencia a los parásitos a través de la interacción entre el sistema inmunitario y el sistema endocrino. Por lo que ellos propusieron que la testosterona tiene un efecto tanto en el mantenimiento de los caracteres sexuales como en la supresión del sistema inmunitario. Esta dualidad fisiológica asegura la honestidad de las señales de los machos, permitiendo solamente a los individuos con resistencia genética a los parásitos, la eficacia en la producción de señales honestas. De está forma, la testosterona obliga a la inmunosupresión, lo que evita el engaño de machos con baja calidad genética a la resistencia a parásitos, ya que dichos machos ven disminuida su salud y su supervivencia con el incremento de la testosterona.
¿Cómo se llegó al planteamiento de la hipótesis del handicap de la inmunocompetencia?
Darwin (1871) planteó que los atributos que incrementan el éxito reproductivo de los individuos pueden evolucionar aún cuando estos tengan un costo en términos de supervivencia; a esta teoría la llama Selección Sexual y a diferencia de la Selección Natural, no implica una lucha por la existencia, sino por la reproducción.
Para explicar su teoría, Darwin, propuso dos procesos: 1) la competencia entre individuos del mismo sexo (generalmente macho-macho) por acceder a los individuos del sexo opuesto, denominada competencia intrasexual y 2) la elección de individuos que poseen caracteres atractivos, para el sexo opuesto (generalmente la hembra elige al macho), llamada competencia intersexual. Sin embargo hoy en día se plantea que también los caracteres sexuales primarios evolucionan por estos procesos, ya que su función no se limita a la transferencia de los espermas o de evidenciar el sexo, sino que también tienen por objetivo el de asegurar la fecundación de las hembras (Arnqvist, 1998).
A pesar de que Darwin (1871) introdujo la idea de que la elección de pareja de las hebras puede ser una fuerza importante de selección en la evolución de los caracteres extravagantes de los machos, no explicó el proceso que está detrás de la evolución de la elección de las hembras. Además, la idea de que las hembras pudieran elegir, fue tomada en un principio con escepticismo. Sin embargo, a finales del siglo pasado, se le dio gran importancia al estudio de la elección de la hembra a través de modelos teóricos y empíricos (Eberhard, 1985; Hamilton y Zuk, 1982)
Para entender la importancia en la elección de pareja es importante tomar en cuenta que los sexos juegan un papel importante en la selección sexual ya que la contribución diferencial de cada uno a la progenie (desde los gametos) crea un conflicto entre ellos (Bateman, 1948). Trivers (1972) amplia este esquema y argumenta que el sexo que invierte más en la descendencia será un recurso limitador para los miembros del sexo que menos invierte; esto afecta el criterio empleado para la elección de pareja, pues cuando la inversión parental de uno de los sexos es muy alta, estos miembros se vuelven muy selectivos en la elección de pareja. El modelo adaptativo para la evolución en la elección de pareja toma en cuenta los beneficios directos (recursos) o beneficios indirectos (buenos genes) para los individuos del se que elige (revisar en Paul, 2002).
Algunos modelos que tratan de explicar la elección de pareja, se basan en el principio de que los ornamentos de los machos han evolucionado porque revelan la salud física, la competitividad conductual o la calidad genética de los individuos, lo que facilita al a los individuos del sexo opuesto la elección de pareja. A esta hipótesis se le conoce como hipótesis del “handicap” o de atributos honestos, ya que el desarrollo y el mantenimiento de los caracteres sexuales tan vistosos, hace a los individuos presas fáciles de los depredadores (por ejemplo, cantos muy elaborados, coloraciones brillantes, despliegues), lo cual reduce su supervivencia. Además, la selección de los atributos honestos ha podido evolucionar porque sólo algunos machos son capaces de mantener caracteres tan conspicuos a pesar del costo que implica (Zahavi, 1975; Hamilton y Zuk, 1982; Folstad y Karter, 1992). Sin embargo, la hipótesis del “handicap” no deja claro cuál es la relación con la salud física, el gasto energético o la calidad genética de los individuos; por lo que se han propuesto otras hipótesis.
Basándose en la propuesta de los caracteres honestos, Hamilton y Zuk (1982), predicen una relación entre la resistencia a parásitos y la expresión de los caracteres sexuales; sin embargo, no discuten el mecanismo del por qué el parasitismo puede afectar la expresión de los caracteres sexuales. Folstad y Karter (1992) describen el mecanismo, y plantean la hipótesis del handicap de la inmunocompetencia, la cual sugiere que la testosterona es la responsable del desarrollo y mantenimiento de los caracteres sexuales y de la supresión del sistema inmunitario.
¿Puede la hipótesis del handicap de la inmunocompetencia actuar en la selección post-cópula?
Darwin modeló la selección sexual (1871) en términos de pre-cópula; hoy en día se sabe que la selección sexual continúa después del apareamiento (Parker, 1970). La selección sexual post-cópula actúa bajo tres mecanismos: 1) Competencia espermática, donde el esperma de varios machos compiten por fertilizar el huevo de una hembra (Parker, 1970; 1998); 2) Elección críptica, mecanismo por el cual la hembra elige entre diferentes espermas en su tracto reproductor (Eberhard, 1985; 1996), y 3) Conflicto sexual, en el cual, cada sexo trata de controlar las decisiones reproductivas del otro sexo, y en ocasiones, llega a reducir su adecuación (Rice y Holland, 1997; revisar Birkhead y Pizzari, 2002).
Al igual que la evolución de los caracteres sexuales masculinos, la competencia espermática está ligada a la hipótesis de la inmunosupresión a través de la calidad del eyaculado; al parecer, tanto las células espermáticas como la calidad del eyaculado se ven modificados por el sistema inmunológico, ya que se ha observado que los machos parasitazos presentan una menor calidad del eyaculado, lo que sugiere una asociación entre los caracteres sexuales y la producción espermática, la cual se ve modificada por la concentración de testosterona (Folstad y Skarstein, 1997).
La influencia del rango social en la hipótesis del handicap de la inmunocompetencia
Las especies que viven en grupos sociales establecen una relación jerárquica de dominante y subordinado (Fedigan, 1992; Sapolsky, 2005), lo que le permite a los individuos de mayor jerarquía tener un acceso diferencial a los recursos (Sapolsky, 2005).
Algunos trabajos en aves (Parker y col., 2002; Buchman y col, 2003) y reptiles (Berger y col, 2005) han encontrado una asociación del rango y la concentración de testosterona con respecto a la expresión de algunos caracteres sexuales, además de una asociación negativa entre la concentración de testosterona y la actividad inmune. Sin embargo, no en todos los trabajos se han encontrado un apoyo a la hipótesis del handicap de la inmunocompetencia (Bilbo y Nelson 2001). Además, se sabe que cuando se da un cambio de jerarquía, la expresión de los caracteres sexuales también se modifica Setchell y Dixson, 2001). Un problema de ésta hipótesis es que sólo trata de explicar la evolución de los caracteres sexuales por elección y no toma en cuenta la competencia.
En estudios donde se administra testosterona a los machos y hembras, se ha visto una clara disminución del sistema inmune, además de un aumento de parásitos en el hospedero. Otros trabajos donde se castra a los machos, se puede observar una disminución en la concentración de la testosterona, y un mayor funcionamiento del sistema inmunológico (revisar en Klein, 2004). Lo que deja claro que si hay un efecto, directo o indirecto de la testosterona sobre el sistema inmunológico, como veremos más adelante.
La influencia de la alimentación en la hipótesis del handicap de la inmunocompetencia
Cómo ya mencioné, los dominantes tienen un acceso diferencial a los recursos. El modelo de Folstad y Karter (1992), hace referencia a que existe una asociación entre la nutrición y la producción hormonal y la capacidad de respuesta del sistema inmunitario. Por lo que una mala alimentación promueve una baja en la producción de andrógenos y poca respuesta inmunitaria, lo que conlleva a un decremento en la expresión de los ornamentos de los machos (Geary, 1999).
La mayoría de los trabajos que ponen a prueba la hipótesis del handicap de la inmunocompetencia no toman en cuenta la alimentación a la hora de establecer su protocolos (Parker y col., 2002; Buchman y col, 2003; Berger y col, 2005), por lo que sus resultados no son concretos al momento de poner a prueba a la hipótesis.
La influencia del estrés en la hipótesis del handicap de la inmunocompetencia
El estrés juega un papel importante en la hipótesis del handicap de la inmunocompetencia, ya que se sabe que la falta de alimentación puede inducir estrés en los individuos (Sapolsky, 2005).
Además, de lo anterior, se sabe que las altas concentraciones de testosterona promueven que los niveles basales de corticoesteroides se eleven (Sapolsky, 1986). También se ha visto que una exposición prolongada de estrés (una elevación crónica de corticoesteroides) induce la supresión del sistema inmunitario (Sapolsky, 2005). Lo que hace difícil determinar cuál es la hormona que en realidad suprime al sistema inmune o si es una coacción de la testosterona y algún corticoesteroide. Otra vía por la cual se puede suprimir el sistema inmunitario, es por la producción de metabolitos de estrógeno tras la aromatización de la testosterona, ya que se sabe, que las células inmunitarias poseen receptores para el estrógeno, ya que se ha observado que el estrógeno excita la actividad del sistema inmune humoral (Klein, 2004).
Una hipótesis alterna: La hipótesis de la redistribución
La imnunoredistribución es una propuesta alterna que trata de explicar el porque se encuentra una disminución en la actividad del sistema inmunitario tras la elevación de la concentración de la testosterona. Braude y col. (1998) mencionan que durante el estrés, las células T (linfocitos) se agrupan en el hueso durante una elevación de los glucocorticoides, y que al disminuir nuevamente las concentraciones de los glucocorticoides, los linfocitos se vuelven a integrar al torrente sanguíneo.
Está hipótesis sugiere que el estrés es el factor por el cual se encuentra una reducción en el conteo de linfocitos durante los trabajos que tratan de probar la hipótesis del handicap de la inmunocompetencia. Sin embargo, hasta el momento no encontré algún trabajo que apoye está hipótesis.
Conclusión
La hipótesis del handicap de la inmunocompetencia es un planteamiento complejo que involucra sólo aspectos fisiológicos de los individuos, y deja de lado factores externos como: la alimentación y el social, que hacen difícil de sustentar. A pesar de esas carencias, está hipótesis tiene una gran aceptación por lo menos en vertebrados, y en especial en mamíferos y humanos. Además, de que su planteamiento pude ser aplicado tanto en la selección sexual pre-cópula como en la post-cópula. Sin embargo no toma en cuenta el papel de la competencia intrasexual, la cual parece estar jugando un papel importante en la evolución de los caracteres y el sistema inmunoendocrino.
La acción de la testosterona sobre el sistema inmunitario es clara, no obstante, el planteamiento de Folstad y Karter (1992) no esclarece si la supresión del sistema es inducido por la testosterona, los corticoesteroides o una coacción de los dos. Pues como se expuso, los niveles altos de testosterona, inducen la liberación de corticoesteroides que pueden ser lo que en realidad inhiban al sistema inmune, o si es por acción de la aromatización de la testosterona a estrógeno.
Está hipótesis deja claro que hay un costo energético en el mantenimiento de los caracteres sexuales secundarios y el sistema fisiológico de los machos, sin embargo, sólo explica la evolución de los machos por elección de las hembras. Quizá sea importante tratar de poner a pruebe está hipótesis con alguna modificación para las hembras, lo cual le daría un mayor valor adaptativo a la evolución de los caracteres sexuales. Por lo que es importante poner atención a la alimentación de los individuos cuando son sometidos a la hipótesis de la inmunocompetencia.
La hipótesis de la inmunoredistribución es tal vez una alternativa que toma en cuenta al estrés y al estrés social al que están sometidos los individuos por una competencia intrasexual, sin embargo, no sé si por el momento existan modelos empíricos o matemáticos que apoyen está idea.
Por lo anterior es importante seguir poniendo a prueba esta hipótesis con protocolos que incluyan variables alimenticias y sociales.
(Leer la bibliografía es al gusto, jajajajaja)
Bibliografía
Andersson, M. 1994. Sexual selection. Princeton University Press, Princeton, N.J.
Hamilton, W.D. and Zuk, M. 1982. Heritable true fitness and bright birds: a role for parasites? Science 218:384–387.
Arnqvist, G. 1998. Comparative evidence for the evolution of genitalia by sexual selection. Nature. 393:784-786.
Bateman, A.J. 1948. Intra-sexual selection Drosophila. Heredity 2:349-368.
Bilbo, S.D. and Nelson, R.J. 2001. Sex steroid hormones enhance immune function in male and female Siberian hamsters. American Journal of Physiology 289:R207–R213.
Birkhead, T.R.; Pizzari, T. 2002. Postcopulatory sexual selection. Nature Reviews. 4:262-273.
Braude, S. Tang-Martinez, Z. and Taylor, T.G. 1998. Stress, testosterone, and the immunoredistribution hypothesis. Behavioral Ecology 3(10):345-350.
Buchaman, K.L. Evans, M.R. and Goldsmith, A.R. 2003. Testosterone, dominance signaling and immunosupression in the house sparrow, Passer domesticus. Behav. Ecol. Sociobiol. 55:50-59.
Darwin, C. 1871. The descent of man and selection in relation to sex. John Murray, London.
Eberhard, W.G. 1985. Sexual selection and animal genitalia. Harvard University Press. Massachusetts and London.
Eberhard, W.G. 1996. Females control: sexual selection by cryptic female choice. Princeton, NJ: Princeton University Press.
Fedigan, L. 1992. Primate Paradigms: Sex Roles and Social Bonds. 2 edn. Chicago: Chicago University Press.
Folstad, I. and Karter, A.J. 1992. Parasites, bright males, and the immunocompetence handicap. American Naturalist 139:603–622.
Garey, C.D. 1999. Male and female. The evolution of human sex differences.
Klein, S.L. 2004. Hormonal and immunological mechanisms mediating sex differences in parasite infection. Parasite Immunology 26:247-264.
Møller, A.P. Christe, P. and Lux, E. 1999. Parasitism, host immune function, and sexual selection. Quarterly Review of Biology 74:3–20.
Parker, G.A. 1970. Sperm competition and its evolutionary consequences. Biological Reviews. 45:525-567.
Parker, G.A. 1998. Sperm competition and the evolution of ejaculates: towards a theory base. In T. Birkhead and A. Møller (eds) Sexual selection and sperm competition. Academic, Press. London. pp. 3-54.
Parker, TH. Knapp, R. and Rosenfield, JA. 2002. Social mediation of sexually selected ornamentation and steroid hormone levels in male junglefowl. Animal Behaviour. 64:291-298.
Paul, A. 2002. Sexual selection and mate choice. Int. J. Primatol. 23(4):877-904.
Rice, W.R.; Holland, B. 1997. The enemies within: intergenomic conflict, interlocus context evolution (IEC), and the intraspecific Red Queen. Behav. Ecol. Sociobiol. 41:1-10.
Sapolsky, RM. 1986. Stress-induced elevation of Testosterone concentration in high ranking boboons: Role of catecolamines. Endo. 118(4):1630-1635.
Sapolsky, RM. 2005. The influence of social hierarchy on primate health. Science. 5722(308): 648-52.
Trivers, R.L. 1972. Parental investment and sexual selection. In sexual selection and the descent of man 1871-1931 (Ed. B. Campbell), pp. 136-179. Aldine, Chicago.
Zahavi, A.1975. Mate selection: a selection for a handicap. Journal of Theoretical Biology 53:205–214.
1 sep 2007
Miro al pasado
(Con suspiros añorantes, melancólicos y sollozantes
De aquellos rostros en que refugie mi corazón)
Entendiendo que todo el miedo ya no tiene razón de ser.
El futuro no tiene sueños, ni cuerpos donde anclar.
Ahora no tengo ilusiones vanas,
Únicamente existe un amor sencillo
Que dejo que se resuelva solo.
9 ago 2007
Libro primero
Libro primero
20 jul 2007
Vals

14 jul 2007
Mana-mana
Soy una mente inquieta que no encaja en este escenario socio-histórico que me ha tocado vivir...
9 jul 2007
ZEN

11 may 2007
Kiis Me Quick
No son muchas las oportunidades de besar a la persona que nos gusta, y sobre ello podía decir mucho, pero sólo les dejaré una frase que resume esos momentos, además de el video "...Son labios fugaces los que agluna vez miré de cerca para ahora sonreir"
26 abr 2007
El MiTo TiBeTaNo De La CrEaCiÓn

.
.
Una mañana, un hombre se despertó y descubrió que en vez de producir un solo fruto, su planta había dado dos. Cayendo en la avidez, se comió los dos frutos; pero, al día siguiente, su planta estaba vacía. Necesitando satisfacer su hambre, ese hombre robó la planta de otro hombre y así fueron haciendo todos, pues cada persona tuvo que robarle a otra para poder comer. Con el robo, llegó la codicia, y todos, temiendo quedarse sin comer, empezaron a cultivar más y más plantas nyugu, debiendo trabajar cada cual cada vez más para asegurarse de que tendría bastante que comer.
11 abr 2007
SuEñOs
Te miro recostada con el porte de un cisne. No sé si es sueño o realidad cuando deslizo mi dedo medio en sagital por tu frente hasta la nariz, y sigo, delineo tu labio superior, el inferior, el color de tus sentimientos se expresa carmín; llenas con la dulzura de un ósculo mi dedo. Abarco tu mejilla con la palma de mi mano derecha, cierras los ojos y estremeciéndote inclinas tu cabeza hacia tu hombro, aprisionas mi mano por unos segundos, la libero y, recojo tu cabello, lo paso por detrás de tu oído, sonríes, nuestros corazones se agitan, nuestras manos sudan. Me haces preso en tus pupilas “El universo estalla en galaxias ¡cuánta luz hay en tu mirada!” Lentamente me aproximo a tu boca, entre la comisura de tus labios deposito un beso. Me abraso. Me encamino hacia tu cuello, respiro profundo sobre él, y embriagado de tu aroma me lanzo a llenarlo de caricias con mis labios. Te encoges de hombros para impedir que siga. Sueltas una discreta carcajada. Te abandonas en mis brazos. Respiras agitada. Me excita tu vaho sobre mi pecho; el pasar mi mano sobre tus senos firmes y esféricos. Te abrazas a mi cuerpo, me tienes entre tus piernas que cortan mis pudores. Tomamos posición de loto, nos mecemos lentamente como un capullo en un cuerpo de agua. Tus manos en mi espalda son la lluvia en las ventanas. Posas mi rostro entre tus pechos, es como aspirar en el más bello de los campos de flores, su aroma me excita más. Nos balanceamos, lentos, rápidos, esos cambios nos complacen. El silencio se rompe con gemidos. De pronto te detienes y me lanzas sobre el lecho, las perlas de sudor en tu cabello parecen estrellas en la oscuridad. Eres como una flor erguida que el viento agita. Te tomo fuertemente por detrás de las piernas. Paso con fuerza las yemas de mis dedos por tu cintura, hasta llegar a tu cadera, “Qué increíble es tenerte, no sé por cuanto tiempo, pero disfruto el instante” (suspiro). Llegamos al éxtasis. “El sabor de tu alma de manzana; el pecado está consumado. El cansancio te lleva a recostarte sobre mi regazo, beso tu frente, te contemplo. No quiero dejar de soñar porque en la realidad comprendo que el amor puede ser igual a la sexualidad, al revés ya no tanto.
26 mar 2007
Para ponernos nombre
Este es un poema de Luis García Montero que quiero compartir; en lo que me doy tiempo de acomodar sentimientos después de la caída.
Para ponernos nombre
Qué difícil se va ha siendo amanecer unidos
Álvaro Salvador
Sólo más tarde se darían cuenta
de que los dos buscaban una historia
no demasiado cerca del amor,
tal vez alguna excusa
para mirar los árboles de enero
temblando sobre el parque,
atravesar las calles
de una ciudad tomada por los himnos
y la ropa de invierno
o verse acompañados
—ilusionadamente—
sobre le cristal celeste de los escaparates.
Fue quizá que los tiempos
sólo hacían posible
para un viejo soldado de todas las derrotas
matar la soledad entre los brazos
de una joven cantante de revista.
Y eran tiempos difíciles.
Mientras recuperaban
su olor a gato sucio los tejados,
ellos cruzaban la ciudad vestidos de uniforme,
soportaban el paso marcial de la soberbia,
recorrían las calles por entre las calesas,
pacientes y humillados,buscando una pensión.
Sólo la lluvia deja
una pasión equivoca
en el banco vacío de los enamorados,
sólo la lluvia olvida
mientras de charol sobre las calles
y un amor diminuto en cada esquina
para el labio que aprende su canción.
Acaso
era también pasar al contraataque
fingir fidelidad,
estar ficticiamente enamorados
en medio del invierno,
decir que nada importa porque seguimos vivos,
porque aquí están tus ojos a pesar de los humos,
hechos para el amor, curtidos por la historia,
llenos de gozo siempre a toda costa.
Sólo un poco más tarde,
cuando la brisa fresca del sesenta
les hizo descubrir que envejecían,
supieron que era hermoso atardecer unidos,
abrazarse debajo de todas sus banderas,
vivir la intimidad que la derrota impuso
no demasiado cerca del amor,
porque la vida
tan fiel como una hermosa melodía
acabó siempre por darles su razón.
10 mar 2007
Él
Espero darme el tiempo para seguir escribiendo. Lo que pasa es que entre las tareas, los experimentos y mi falta de honestidad, sobre todo lo último, no me es nada fácil escribir. Vivo estos últimos días engañanadome para poder sobrevivir. Espero que todo en mi cabeza tome más orden, porque la verdad, no decir las cosas me está empachando. Pero todo se resuelve en abril. Uy... falta. :s
Saludos y abrazo a TOD@ S
25 feb 2007
Ella y Él
“Vino con su ropaje azul: era un girón de cielo.
Fijó en mí sus ojos: eran dos espadas.
El encanto duerme bajo sus párpados.
Me veo en sus pupilas y me arde su flameo.
Y dos centinelas están en defensa de su corazón:
duros como el hierro y más suaves que el narciso”
Se conocían desde hace tiempo. Él ya la quería desde entonces, y ella correspondía a dicho amor, pero no habían querido pasar la línea, quizá porque estaban muy concientes de que no era el mejor momento; ambos habían pasado por malas experiencias de pareja, y lo que más les unía en ese instante, era la decepción y la falta de sueños. Era tanto su resentimiento, que lo expresaban hasta el punto de un día separarse.
Tiempo después, volvieron a reencontrarse, porque jamás cortaron la relación de tajo. Ambos conservaban sus correos.
Pasados un par de años, recuperaron su fe ante la vida y, sonrisas y sueños se convirtieron en su eslabón, al grado de confesarse atraídos el uno por el otro. Su trato se convirtió en una experiencia de confianza, cariño, y la magia del amor que se hizo presente con las miradas, los detalles, un beso tierno sobre las mejillas era el símbolo de “estoy aquí”. Y ambos coincidían en que el presente se basaba su alegría, y estaban concientes de que en cualquier momento todo podía dejar de ser, que el escenario podía dejar de ser blanco para volverse oscuro, pero creían que todo valdría la pena, porque no eran de los que se arrepintieran de lo sucedido, sino de lo que dejaran de hacer. Sin embargo, algo cambió repentinamente en sus vidas.
La distancia me ha permitido pensar en nosotros, en especial en lo que siento, no sé si te quiero como amigo o como pareja. Discúlpame por no decírtelo en persona; las circunstancias no me lo permiten y creo importante hacértelo saber, porque no es justo.
Espero que podamos hablar pronto.
Al terminar de leerla, se estremeció, y no podía creer que de forma indirecta lo mandaran a volar. Sus ojos se nublaron”Terminar siempre duele, pero me lastima su falta de sinceridad, por qué no mejor decir: No eres lo que quiero. Me gusta otro. No me siento a gusto. Etc. ¿Por qué no pudo ser directa? ¿Por qué me subestima?”El no podía contestar de la misma forma, por lo que decidió ir hasta donde ella para aclarar las cosas. Compró un boleto de autobús. Durante el camino se convenció de que su papel no era convencerla de que lo quisiera, de que siguiera a su lado, porque el deseaba estar con alguien que así lo quisiera por su propia voluntad, porque bien sabía que por más Hidrógeno que haya, mientras no exista un molécula de Oxígeno, no puede existir agua (H2O). Y mientras reflexionaba, el sueño lo venció, y no fue conciente de que el camión se volcó a un barranco. Al tiempo que esto ocurría, ella se sintió una tonta por haber enviado esa carta, porque al final sabía que en él encontraba lo que deseaba desde hace tiempo. Entonces, decidida marcó a su teléfono celular, pero nadie contestaba, y mientras lo intentaba e intentaba, en la radio se informaba de un accidente de un autobús con camino hacia donde ella se encontraba. De pronto una sensación la ahogo en un mal presentimiento, el cual se manifestó al escuchar que entre los muertos del accidente se encontraba él.
12 feb 2007
SuElToS
porque entiendo que por el simple hecho de amar serás feliz,
29 ene 2007
Suavemente
"Cuando pasaste por dalente de mi, no comprendí que pudiera atreverme a levantar los ojos hasta ti. Era como un esclavo en tu presencia. Mi corazón no temblaba junto a ti, mo me decía nada de ti. Estaba sereno. Mi alma no reconocía la tuya, aunque sentía la dulzura junto a su hermana maravillosa" (Dostoievski)
13 ene 2007
Un rinconcito del cielo
9 ene 2007
Sueños en la Peña de Bernal.


4 ene 2007
Calaveras y Diablitos
¿Por qué no aceptar, entregarse y dejar de seguirle temiendo?
"Tal vez los sueños no siempre son las imágenes de nuestra imaginación, o proyecciones de nuestra percepción, como tus labios que dibuje con mi mano, me basta con cerrar los ojos para borrarla, abrirlos para volver a pintarla, con mi ojos, en los que te llevo cautiva para no perderme de tu rostro, esa sonrisa tierna y juguetona, te describo sin lograr definirte, mujer, eres mujer, la que ayer al mirar, desató las explosiones, me pones nervioso, y entonces sólo quería acercarme lentamente hacia tu rostro, y deposite un dulce beso sobre tu mejilla, quería dejar de imaginar y soñar y despertar con ese beso sobre tu dulce boca y guardar ese instante efímero, recordarlo, evocar un lenguaje de sentimientos, para reprocharme lo que hice, siempre pesará menos que aquello que no realice, prefiero vivir con ello que sin tu recuerdo".
¡No quiero retenerte y tampoco que te vayas. Quiero sólo que estés!
CaMarA de AmOr
